EL LLAMADOR DE ANGELES
El llamador de ángeles forma parte de la joyería ancestral que se utiliza desde hace siglos en muchas culturas, que van desde Indonesia hasta México. Se trata de un collar con una esfera colgante en que contiene dentro una bola de plata cuya finalidad es producir un timbre sutil y armonioso cuando es agitada, siendo este sonido muy relajante para quien lo lleva puesto. La leyenda cuenta que el tintineo suave, el cual es único para cada es esfera, posee propiedades mágicas y maravillosas: principalmente tiene el poder de llamar al ángel de la guarda de la persona que usa este collar, para proporcionarle protección, bienestar y la orientación espiritual que necesite.
La leyenda cuenta que la única condición que los ángeles pusieron para el uso de estos amuletos fue que al destinatario no podría darse el colgante a distancia, de lo contrario toda la magia desaparecería. Así pues si has pensando que un llamador de ángeles es un excelente regalo, debes asegurarte de entregarlo personalmente.
Otra leyenda cuenta que antes de ser concebido el pecado original, los humanos y los ángeles compartíamos un mismo espacio en el paraíso. Al ser expulsados de éste, los ángeles sintieron mucha pena por nosotros por sentirnos perdidos y llenos de emociones negativas. Para ayudarnos nos obsequiaron los llamadores de ángeles, con la intención de que siempre que nos sintieramos solos, tristes o asustados, los invoquemos con el sonido del collar.
Su timbre suave y armónico es también un recordatorio para que vivamos el presente, una invitación para calmar el ritmo en este mundo moderno agitado y lograr centrarnos en lo que es esencial. Estos amuletos se han utilizado desde tiempos medievales a modo de protección espiritual. Uno de sus usos más reconocidos, es el llamador de ángeles para futuras madres.
Otra leyenda cuenta que antes de ser concebido el pecado original, los humanos y los ángeles compartíamos un mismo espacio en el paraíso. Al ser expulsados de éste, los ángeles sintieron mucha pena por nosotros por sentirnos perdidos y llenos de emociones negativas. Para ayudarnos nos obsequiaron los llamadores de ángeles, con la intención de que siempre que nos sintieramos solos, tristes o asustados, los invoquemos con el sonido del collar.
Su timbre suave y armónico es también un recordatorio para que vivamos el presente, una invitación para calmar el ritmo en este mundo moderno agitado y lograr centrarnos en lo que es esencial. Estos amuletos se han utilizado desde tiempos medievales a modo de protección espiritual. Uno de sus usos más reconocidos, es el llamador de ángeles para futuras madres.
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